Mierda en el culo

Hoy me he dado cuenta de una cosa. Tal vez fue ayer, no lo sé, tampoco me importa mucho. la gente se pone seria cuando algún cretino habla de la persona que piensas, crees, juras, perjuras y engañas que no te importa o deseas. Te pones serio, se se te nubla el juicio y tus neuronas no trasmiten bien la información al alma. Callas, asientes e intentas cambiar de tema. Te importa, sabes que lo saben, sabes que lo sabes. Te jode mucho, como un enema público en la plaza mayor de tu puto pueblo. Pero bajas la vista, aguantas ese dolor en la garganta y esperas, como cuando esperas una navaja en tu cuello, a que todo termine.

Agarras la botella, bebes, sigues bebiendo y hablas de otra cosa, saben que te importa, que te hiere, que malgastas horas y horas en no pensar en ello, y digo ello por no decir... no voy a decirlo.

Miras a la pared y ves esos ojos que pintastes una vez, de una vieja foto, de un viejo momento, de una vieja, de una antigua y ojala olvidada relación. Esos ojos te recuerdan tantas escenas con las que te masturbas sin piedad, tal vez llorando por la sangre o el espíritu, tal vez por algo que no comprendes y no sabes explicar, que sientes pero no sabes lo que es, que no sabes escribir sobre él, que al pintar sobre ello solo pintes de un color gris.

Busco novia, no fumadora no fea (lo de fumadora me da igual, y lo de fea también).